Al día siguiente: 20 de agosto 《No puedo estar tan nervioso por saber que conoceré a su hermano, no puedo ser tan tonto...》 Golpeo la puerta del piso donde vive y espero pacientemente. A los pocos minutos la puerta se abre y me quedo sin saber que decir. El hombre que me abre es bastante alto, de cabello oscuro al igual que ella y los ojos son idénticos... Es más, sus facciones son muy parecidas. —¡Pero hombre, pasa que se quién eres!— Me dice al notar que no puedo articular palabra alguna. —Perdón, es que...— Intento decir. —¡Amor!— La escucho exclamar y al voltear allí viene. Se ve deslumbrante. Un mono corto color blanco y sin tirantes. —¡Como te he echado de menos!— Dice abrazándome. —Y yo a ti mi amor.— Respondo y amarro mis brazos a su cintura. —Cariño, te presento a mi h