NICHOLAS Saco las llaves del contacto del coche de Kristal. Al salir del coche miro con detenimiento la jodida casa dónde se traía mi padre a Miriam para follar y que no nos diéramos cuenta. No quiero estar aquí, pero me repito una y otra vez que lo hago por Kristal, que estoy cambiando por ella, que soy bueno por ella. Me acerco a la puerta de la casa y golpeo con fuerza la puerta para que escuchen. Sonrío al ver a Kristal cuando me abre, y bajo la vista a las partes mojadas de su vestido, haciendo que este se le pegue al cuerpo y deje ver sus bonitas curvas. Me acerco a ella para besarla, pero niega con la cabeza y se retira de la puerta. Miro con atención la pelirroja que hay a mitad de la entrada, y bajo la vista al crío que la coge de la mano. Me tenso y cierro de un portazo la puert