〔Bastian〕 Cee desapareció por completo, no regresó a la oficina y tampoco lo hizo a la casa, por lo que saqué a Rex solo y luego me senté en el sofá a esperarla mientras veía un poco de televisión y trataba de distraerme. No pude, tenía a Cee tan dentro de mi ser que me era imposible no imaginarla en la escena que ambos repetimos en el baño momentos atrás. Si tan sólo hubiese cerrado la puerta con seguro tal vez otra cosa hubiese sido. ―¿Qué me ves? ― Le digo Rex que no hace más que verme desde su cama. ―¿Crees que estoy pagando algo? ¿Cómo un karma? ¿No lo pagué ya con “ya sabes quién”? El timbre suena y de pronto me paro para abrir la puerta y ver a Junior con cervezas y su hijo al lado. ―¡Tío! ― Me grita feliz mientras se lanza a mis brazos. ―¡Qué grande estás! ― Comento. ―¿Está