Llegamos al restaurante, estoy un poco ansiosa. Daniel dijo que me dirá algo importante y que es una sorpresa, ya quiero saber ¿qué es?
Nos sentamos en una mesa que nos recomienda la anfitriona y nos da el menú. Pedimos la comida, pero quiero saber lo que Daniel me dirá.
—Dime por favor, quiero saber —le digo muy apresurada.
—Está bien, te lo diré en este momento, o siento que te dará un colapso, mi amor. Creo que pronto saldremos del problema financiero de la empresa, estaba pensando que solo falta una semana para que tú vallas a la universidad, por eso te llevaré toda la semana de vacaciones a Francia, ¿qué te parece?
—¡¿De verdad, contigo?! —Exclamo muy emocionada.
—Sí, estaremos juntos, y en Francia podemos tomarnos de la mano y ser libres, nunca he ido a Francia, pero tu padre si
