Me han tratado la pierna, estoy en mi departamento con Henry, y Linda mirándome. —¿Qué te dijo Gabriel? —se ha lavado la sangre del rostro. —Dice que no conocía a mi padre. —le miro —¿Hay algo que necesito saber antes de proseguir? Deja salir un suspiro de resignación. Mira a Henry, para que se vaya, pero le digo que está bien, que puede confiar en él. Henry me devuelve una sonrisa cálida. Tendría que hablar de las cosas después con él, nuestra relación, si aún quedaba algo. —Conocí a tu padre en unas carreras clandestinas, corríamos para unos mafiosos. Era un evento de gran magnitud, donde se reunían grandes personajes del mercado n***o; narcotraficantes, mafiosos, todo lo que te imagines. Fue el primero que se me acercó en ser amable. —sonríe al recordarle. —Aunque éramos enemigo