Noe
Decir que estar con Charlie en la intimidad fue maravilloso, es poco. Realmente sentí que podía alcanzar el cielo con las manos, su mirada, su sonrisa, la manera en la que se entregó a mi. Definitivamente no era lo que tenía planeado pero tampoco me arrepiento de que así haya sucedido, Charlie es una mujer excepcional en todos los sentidos.
Ahora solo puedo observarla mientras duerme a mi lado, que fortuna la mía, que dicha es tenerla. Las imágenes que por mucho tiempo me lastimaron llegan hasta mi, el poco interés que tenía Olivia en esto, en ser tiernos, en compartir una noche, incluso el sexo, yo era un egoísta por que ella así lo quería, ni siquiera me permitía hacerle sentir placer, solo se quitaba la ropa y se acostaba en la cama con las piernas abiertas.
«Sirvete, que tengo
