Mas alla de lo que ves.

Titulo: Más allá de lo que ves.  Autora: Alexandra Figueroa. Genero: Fantasía.  Hola criaturita hermosa, gracias por estar aquí, espero disfrutes esta historia ya que esta hecha con mucho cariño para ti. Como sabes es una historia registrada y se te pide amablemente que no distribuyas contenido total o parcial por respeto a los derechos de autor. Sin mas que agregar espero que disfrutes la lectura, Bienvenida. :) Obra Dedicada a mi criatura bella, Karina Lozoya, por seguir ahí aun cuando me fui. Te quiero mil.                             La vida nos enseña más de lo que nosotros creemos. Nada es imposible, recuerdo a mi madre decir antes de partir. Sólo necesitas más, abrir tu corazón, tus ojos y tus sentidos, por que lo que a partir de hoy descubrirás, está más allá de lo que ves. ―¿¡Estás bromeando !? ―Alzo la voz tanto que hasta yo me sorprendo―. Mamá eso que estás diciendo debe ser una locura. ―No lo es, es una verdad que sólo revelamos cuando nuestro final se acerca. ―Dice con voz débil. ―¿Morirás? ―Cuestiono espantada. ―No moriré, bueno, no de esa manera en la que estás pensando. Es muy dramática. ―¿Cómo sabes que estoy pensando en una muerte dramática? ―Puedo leer tu mente. ―Dice como si era algo normal en una conversación. ―¡No es gracioso mamá! ―Lloriqueo. ―No moriré hablando pausadamente y tratando de revelarte un secreto oculto, eso ya lo he hecho, por eso es que nos encontramos en esta situación. ―Señala―. Esto no será fácil Dharani, pero es tu destino, así como será el destino de ...― se detiene―, ya lo entenderás hija mía. Todo es parte de crecer. ―Tal vez esto sólo es ... ―¿Delirio antes de morir? ―Me interrumpe―, no lo es. Eres una Ragana Phoenix, una bruja. Y confío en que seas mejor de lo que yo fui. ―¡Ni siquiera te ves enferma! ¿Cómo quieres qué crea que vas a morir? ―Las Raganas no morimos de manera común. Mi cabello pierde color, el clima está cambiando. Lamento no poder instruirte y guiarte por el camino que vas a tomar a partir de hoy. Sólo quiero decirte una última cosa antes de partir. Miro su cabello que normalmente era negro azabache perder color, hebras platinadas cubren el oscuro cabello de mi madre, muevo con la cabeza y no sé si lloro por miedo de que sea todo verdad o por estar perdiendo a mi madre. »Vete de aquí antes de que tu cabello cambie. ―Mamá no me dejes. ―En el cajón, junto a las especias hay algo para ti. La llave está en el tarro de miel, búscala, empaca todo lo necesario y vete de aquí. Si alguien pregunta por mi sólo dí que salí de viaje y que tú te irás después conmigo. Tienes dos lunas y un sol para irte, te amo Dhara, y sé que algún día lo entenderás. La vida nos enseña más de lo que nosotros creemos. Nada es imposible. Solo necesitas más, abrir tu corazón, tus ojos y tus sentidos, porque lo que a partir de hoy descubrirás está más allá de lo que ves. El pelo de mi madre se ha platinado por completo, y como si fuera una película de ciencia ficción, el mismo cabello va envolviendo su cuerpo completamente, una vez que está cubierto por cabellos platas se va haciendo más y más pequeña, no puedo dejar de ver lo que sucede mientras el corazón se me estruja. Cada vez es más pequeña, más y más. Y cuando apenas queda nada, la maraña de cabellos se abre y sale una mariposa de colores brillantes. Bate sus alas con fuerza y sale por la ventana. Un gemido doloroso sale de mi y lo ahogo con mis manos. ―Esto no está pasando, esto no está pasando. ―Me digo a mi misma. Lloro en silencio tratando de asimilar esto pero no puedo. ¿Mi madre era una bruja? ¿¡Mi abuela lo era !? ¡Yo soy una bruja! Me recuesto en el suelo y me permito llorar y gritar para sacar el dolor que siento por haber perdido a mi madre. Afuera, la lluvia cae sin parar, hay nubes grises cubriendo el color celeste del cielo, maldigo una y otra vez y me quiero convencer de que es un mal sueño y que cuando despierte todo será como ayer, antes de mi cumpleaños, antes de que mamá se fuera. Mis ojos pesan y se sienten hinchados, a cada momento voy observando menos de mi casa, hasta quedarme completamente es oscuridad. Siento el sol en la cara, me estiro y siento la suave sábana de mi cama. ¿Un momento? Me levanto de golpe y miro a mi alrededor. ¡Estoy en mi cama! Pero ... Pero ... Me levanto descalza y corro hasta el cuarto de mi madre, esta solo, ella no está. -¡Mamá! ¿Dónde estás? ―Grité por toda la casa pero nada. Pasé por el comedor y en la mesa junto al desayuno hay una nota, me acerco para tomarla y siento un escalofrío recorrer por toda mi espalda, es de mi padre. ni siquiera en ti misma durante el lapso de transformación, cuando llegue el momento, tu fuerza y tus limites se pondrán a prueba, de eso depende que nos volvamos a ver o no. Te amamos hija, todos esperamos por ti " Para este momento mis ojos son mares, no puedo dejar de llorar como niña pequeña. ¿Por qué mi padre jamás me dijo nada? ¿Por qué no puedo verlos? Recuerdo que mi madre me habló sobre algo para mi en el cajón de las especias, camino decidida hacía ahí, busco el tarro de miel pero esta lleno, tomo un plato y vacío el contenido del tarro, hay una llave pegada al fondo, trato de sacarla pero no puedo, cansada de hurgar el endemoniado botecito lo pongo en la mesa con fuerza y la llave se despega, entorno los ojos y lo saco, la enjuago con algo de agua tibia y cuando considero que esta lo suficientemente limpia abro el cajón. Hay papeles ahí, en la portada de la carpeta en letras rojas se puede leer “Manual para Ragana Phoenix” lo tomo y empiezo a leer letra por letra tratando de entender. Si estas leyendo esto es porque eres una descendiente original de las Raganas Phoenix. Puede que te estés preguntando si esto es verdad, pues dejame decirte que sí. A partir de hoy deberás seguir y cumplir ciertas reglas que las brujas del clan de las Raganas Phoenix han seguido por millas de años. 1. La nueva bruja deberá abandonar su lugar de origen antes de que pasen dos lunas y un sol, a partir de la muerte de su madre sin excepción alguna. 2. Por ningún motivo la bruja confesará su nuevo estatus a nadie. 3. La bruja tiene prohibido usar sus poderes para dañar a alguien sin ningún motivo; Venganza, celos, diversión, etc. 4. No usará para beneficiarse con salud, amor o riqueza ya que esto sería contraproducente. 5. No deberá usar sus habilidades en público, a menos de que la vida de alguien o la misma este en un inminente peligro mortal. Sigo leyendo atenta cada palabra y regla, pero hay una que sobre sale de todas las demás, y sobre sale porque esta en rojo. 6. Queda estrictamente prohibido para cualquier bruja beber alcohol bajo ninguna circunstancia, los efectos de esta bebida pueden ser peligrosos y mortales. ¿Eso es broma? ¿Qué tiene que ver el alcohol en todo esto? Me froto los ojos cansada de todo, hay un montón de hojas pero no tengo ganas de leer tanto. No me siento poderosa, de hecho me siento peor que basura justo ahora. Como tonta muevo mi dedo apuntando el todas las direcciones posibles, nada explota, nada se mueve, nada vuela. -¡Abracadabra! ―Grito apuntando el florero, pero nada sucede―. ¡Ocus pocus! ―Digo con mis dos manos al frente, pero nada―. ¡Alakazam! ―Miro fijamente el florero con mis ojos achinados, pero nada sucede. Me doy por vencida con eso de hacer que las cosas se muevan, debo verme ridícula. Miro por la ventana y una señora, vecina nuestra, me mira con cara de preocupación y algo de curiosidad. Sonrío nerviosa mientras observo como se acerca a la puerta, me siento como en una película de terror esperando a que venga el asesino a tocarla, después de unos segundos, golpes insistentes en la puerta me hacen gritar y el florero explota en pedazos. ¡Cochino florero! Normalizo mi respiración y camino a la puerta, abro con una sonrisa y la vecina me observa. ―Hola Dhara, ¿está tu mamá? El solo mencionarla hace que mi corazón se apachurre de nuevo. -UH no. Mi mamá ya no esta aquí. ―Digo sin pensar. ―¿A dónde ha ido? ―Cuestiona afligida. ―Ah, bueno, ella se fue de vacaciones con mi padre, yo me iré en unos días. ―Caramba niña, por un momento creí que ella había fallecido, la cara con la que me lo dijiste me espantó. “No, no es nada de ... eso. ―Dile que vine cuando la veas. Y no se preocupen por el jardín, yo lo cuidaré. ―Muchas gracias, es muy amable. La vecina asiente y se da la vuelta, when I'm a point of close la puerta habla poniéndome seguramente, blanca como papel. ―Ese nuevo look que tienes es algo extraño, recuerdo haberlo visto antes pero no recuerdo en donde, fue hace cincuenta años creo, el algo retro pero dicen que eso se pone de moda después. Te ves muy moderna, vintach, como le dicen ustedes a lo viejo. ―Dice a su manera la palabra―. Bueno, dile a tu madre que vine. Asiento atontada y cierro la puerta cuando ya se ha ido. Debo confesar que me da miedo verme al espejo, pero aún así lo hago y mi sorpresa es tremenda. ―¡Ay por el cielo! No no no. ¡Esto es una locura! ―Chillo mirando un mechón de mi cabello volverse blanco, no plata, no rubio, blanco total―. ¡Parecen canas! ¿Me iré a hacer vieja? No no no. No quiero ser una bruja fea. Me dejo caer en el suelo y lloro, lloro como si esto fuera lo peor del mundo. Golpecitos en la ventana alertan mis oídos, de nuevo esta lloviendo. ―Terminaré loca antes de lo que creí.