Capítulo 7

1619 Words
Nova No quería ir a ver a la estafadora de Nuria, nunca creí en ella y no empezaría a hacerlo ahora. ¿Qué podía decirme que no supiera? ¿Qué estoy muerta? Uff… ya era noticia vieja, hasta empezaba a acostumbrarme. Aunque todo sería más sencillo si no tuviera que tratar con Bruno, no quería culparlo, pero él me hizo sentir tan mal que lo único que pude hacer fue correr y gracias a esa tontería, me morí o mejor dicho me mataron. También era consciente de que se había disculpado y en parte, solo en parte, lo había perdonado. Eso no disminuía la sensación de odio que me producía pensar en sus palabras. ¿Por qué dudo? No era tan mala opción, inteligente, simpática, dulce. ¿Qué diablos le desagradaba de mi? —¿En qué piensas? Solo bufas y bufas, así asustaras a cada animal en el lugar. —¿Ahora se creía gracioso? —En que esto es una perdida de tiempo, no nos dirá nada, porque no es una bruja, es una estafadora. —¿Por qué estas tan segura? ¿Le has consultado algo? —rodé mis ojos y me giré, comenzando a caminar de espaldas, para verlo mientras hablaba. —Claro que no, pero no creo en las brujas. —al ver que iba a decir algo, seguro que para pelear, proseguí. — Sé que dirás que es imposible que no crea en las brujas, cuando estoy rodeada de seres paranormales, pero es muy diferente. —¿Así? ¿Y en qué se diferencia? —Ellas solo te dicen lo que quieres oír. Si te ven triste o desesperado, te dirán que todo mejorará, solo debes armarte de paciencia y si te ven feliz, trataran de venderte alguna chuchería para que conserves esa buena vibra… —Eres muy critica con su especie. —Solo digo lo que veo, nunca las he visto hacer un truco, que no tenga una explicación. —Pero puede sorprenderte. Nuria ha ayudado a mi madre varias veces. —traté de recordar alguna ocasión en que hubiera visto a la luna Andrea con Nuria, pero ninguna llegaba a mi mente. —Mi madre estos últimos años ha enfermado muchas veces, es la razón por la que te contrato para cuidar a Mina, sus crisis aumentaban y se le hacía imposible cuidarla. Ahora entendía porque me contrato a pesar de no tener ni una referencia, estaba desesperada por ayuda, pero seguía sin confiar en Nuria. —No sabía que tu madre estaba enferma. —Los médicos no saben que es, pero los remedios naturales que Nuria le proporciona han menguado bastante su dolor. Me gustaría poder ayudarla un poco más, pero tengo los deberes de alfa, has notado que mi padre viaja mucho y me toca el doble de la responsabilidad. —eso era verdad, no entendía por qué últimamente el alfa Mauro viajaba tanto, pero ya que estaba tan predispuesto a hablar, lo averiguaría. —¿Sucede algo malo? Pregunto porque he notado que tu padre no se queda mucho tiempo entre viaje y viaje, no solo eso, siempre parece molesto y preocupado, aunque trate de disimularlo. —Cuando Bruno se quedo callado, creí que me había pasado, pero él había sido quien saco el tema, no yo. El silencio cayó entre ambos y me convencí de que no compartiría esa información conmigo. Tal vez en verdad era grave. ¿Qué si la manada estaba con problemas económicos? ¿O si los ataques comenzarían a volverse más frecuentes? Claro que no querría comentarme algo así, él seguro quería olvidar sus preocupaciones y no espero que yo desatará mi lado cotilla y no dejará de preguntar. —Mi padre siempre fue un hombre difícil, pero con la enfermedad de mi madre se ha vuelto aún más estricto, principalmente conmigo. Gracias a la Diosa, Mina no ha debido soportar sus malos tratos, solo finge que no existe. Eso también lo sabía, muchas veces mi pequeño ratoncito se había quejado de la falta de atención de su padre, pero creí que exageraba. El hombre aún era el alfa, tenía muchas responsabilidades en sus hombros y traté de explicarle eso a Mina, ahora veo que estaba equivocada. Quería seguir preguntando, pero habíamos llegado y la fachada rosa chillona de la casa de Nuria, me saludaba como burla. —¿Enserio tengo que entrar allí? Diosa, desde aquí estoy respirando la estafa. —murmuré arrugando mi nariz. —Vamos Nova, enserio no perdemos nada con probar. Yo quiero saber que sucede, no es normal que te vea y que hable contigo como si aún estuvieras viva. No me gusta admitirlo, pero aún estoy un poco asustado. —cuando lo ponía de esa manera… —Solo le daré una oportunidad, pero veras que en verdad es una farsa, que nos dirá que con el tiempo y cuando te perdoné, si es que algún día te perdono del todo, me podre ir. —Deja de sacar tus propias conclusiones y concéntrate. —Claro, le mandaré mi energía fantasmal. —reí entre dientes al verlo algo ofuscado. Pero no porque él le creyera, yo debería hacerlo. —Mejor entremos. —Seguí riéndome sin importarme lo que él pudiera pensar, después de todo ya me creía alguien infantil. El lugar apestaba a incienso y a donde quiera que mirará había adornos, de esos que hacían ruido cada vez que los tocabas, lo cual no dejaba de hacer. Enserio era algo infantil, pero era lo único divertido que podía hacer aquí. —Deja de hacer eso, puedes romper algo. —si Bruno creía que con eso pararía se equivocaba, él no tenía ninguna autoridad sobre mi. —Si se rompe que me demande, o mejor aún, que te lo cobré a ti, eres quien me trajo. —respondí dispuesta a volver a tocar esta cosa, pero me detuve al ver un bonito prendedor con forma de gatito, estaba segura de que Mina lo adoraría. —¿Qué miras? —preguntó, irrumpiendo en mi espacio personal. —Ese prendedor, es hermoso, a tu hermana le encantaría y podrías comprárselo para levantarle el animo. Dile que te ayude a elegirlo hace días. —¿Tú crees? —¿Hablando con fantasmas Bruno? Estaba segura de que vendrías, anoche apareciste en un sueño y te veías muy preocupado por algo, justo como ahora. —puse mis ojos al escucharla y al voltear allí estaba ella, con esa sonrisa falsa. —Te lo dije, solo te estafará. —bufé hacía Bruno. —Necesito tu ayuda Nuria y es bastante urgente. —No eres tú quien me necesita, sino ella. —su mirada se clavó en el espacio vacío, en el que casualmente me encontraba de pie. Eso me asustó un poco. ¿Ella cómo demonios sabía que yo estaba aquí? No solo eso ¿Cómo sabía que era un ella y no un él? —¿Estas seguro de que morí? Porque si es una broma y ella en serio me ve, te arrepentirás Bruno. —¿Puedes verla? —Le preguntó a Nuria, ignorándome. —No, pero puedo sentirla y no esta feliz de estar aquí. —bueno, tal vez no era tan mala después de todo… —Para nada, me costó demasiado traerla. Pero la verdad necesito saber la razón de por qué la veo, cuando nadie más puede. —Necesitamos saberlo, los dos, de lo contrario no estaría aquí. ¿Quién enciende incienso tan temprano? Apestaré al salir de aquí. Bruno volvió a ignorarme, concentrado en lo que Nuria hacia. Ella tiraba un par de piedras, con formas extrañas sobre la mesa y negaba… —¿Encontraste a tu compañera? ¿Cómo te callas algo tan importante? —si vio eso, debió ver que él era un tonto y esa era la respuesta. —Tenía mis razones para hacerlo, pero aún no me respondes lo que quiero saber. —Esa es la razón por la que puedes verla, ella es tu compañera e hiciste algo muy malo, tanto que alguien te maldijo. Pero no es solo eso, no solo la veras y la escucharas, también dependerás de ella… —Oh esto si me esta gustando. —sonreí, pensando en tenerlo pidiéndome algún favor. —¿Para que dependeré de ella? —por su parte Bruno no compartía mi emoción, era obvio, le había dejado en claro que lo odiaba. —Ella será la encargada de llevarte a tu nueva luna. Pero no te equivoques, no será una nueva compañera, para tu desgracia solo ella lo será—se refería a mi. — Y su aura no te esta transmitiendo muy buenos sentimientos. Claro que no lo hacía, estaba por reventar. ¿Qué era esto, una broma? ¿Por qué diablos yo tendría que ayudarlo? —No quiero, yo no soy una jodida casamentera. —¿Por qué ella? —¿Y cómo quieres que lo sepa? Solo te digo lo que veo. No se que fue eso tan grave que le hiciste, pero se ve que en verdad la lastimaste y siento que es injusto para ella esta tarea, pero por algo se la dieron. —entonces se volteó y miró al lugar donde me encontraba. — No confías en mi y no me importa convencerte, solo te digo que no estoy de acuerdo con lo que te toca, yo no lo haría, aunque eso significaría vagar toda mi vida en este mundo. Pero veo más fuerza en ti, que en mi y por eso si me necesitas aquí estaré. Pero yo no quería ni ayudarlo, ni ser una jodida alma en pena por siempre, quería mi vida de antes o terminar de morir.
Free reading for new users
Scan code to download app
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Writer
  • chap_listContents
  • likeADD