—¿Qué demonios es esto? —ella me mira cabreada —¿Acaso te coges a tu ex a mis espaldas?. —No. —Si. —dijo Melissa desconcertándome —Lo siento no quería que te enteraras… Tomé del brazo a Melissa y la saque de mi oficina pese a sus quejas de que estaba desnuda, pero eso no es mi problema si no el suyo, cerré la puerta y al voltear ella inhala y exhala rápidamente intentando calmarse, Bianca es parecida su nombre ya que es muy blanca y su cara estaba roja de la cólera. Quise controlarla y ayudarla con su coraje pero ella me dijo que no lo tocara. Ella estaba tan molesta que solo hacía gritar en y maldecir no tan fuerte, me lanza miradas asesinas como si me quisiera decir que todo es mi culpa. “¿pero porque demonios se enoja, no somos una pareja real, y yo porque estoy tan interesado e