Oz
Llegado el gran día, Travis y yo llegamos con maleta en mano a la residencia donde se encuentra Isma siendo recibidos por todos con gran entusiasmo (a excepción de Linda por supuesto) y al poco tiempo llaman a la puerta con el encargo especial que había hecho, seguido de algunos estilistas y maquilladores profesionales. Todos estaban sorprendidos, especialmente las pequeñas quienes gritaron de la emoción y salieron disparadas a bañarse junto con Travis, pero Isma y Linda no hacían más que preguntar lo que ocurría, me limité a informales que iríamos a una gala muy especial siendo el motivo para ir tan formales y nos fuimos a duchar en lo que el personal se encargaba de acomodar todo para empezar a trabajar.
Cerca de las cinco y media de la tarde todos estábamos listos, los hombres con
