Gael No lo podía creer, ¿Para qué demonios le había pedido que no dijera nada? ¿Para qué me gaste en preocuparme? Debí imaginarme que con lo malditamente necia que era, ella iba a hacer lo que quisiera. Estaba loca, no podía adjudicarle una palabra que la definiera mejor. Ella estaba completamente e irremediablemente loca. Ella no sabía si mis amigos no eran personas a las que temerles, no, ella solo va y les confiesa haber investigado a nuestra especie con el fin de exponernos al mundo entero. ¿Acaso alguna vez pensaría en las consecuencias de sus actos? -¿Estabas investigando a los hombres lobos? ¿A que te dedicas Rubí? -tenia que explicarle esto a Cedric de una vez o de lo contrario él podría mal interpretar absolutamente todo. -Cedric, yo te explicaré. -Comencé a decir, sol