Laurie Me había reunido con Carmen y su hermana Aysel, la cual tenia mi edad, pero era en verdad seria y parecía mucho más madura que su hermana y que yo, no es que yo fuera muy infantil, pero tenia mis momentos. Sin embargo, sabía que ella también los tenía, ya que Carmen me había dicho que su hermana estaba metida en ciertos problemas, que moría por conocer. Ambas tenían el cabello castaño, tan largo que llegaba a su cintura, pero lo más llamativo eran sus ojos. Eran de un marrón oscuro, con pestañas tan largas que parecían falsas. Eran hermosas, confiadas y fáciles de tratar. —Me dijo mi hermana que vienes de una manada, eso debió ser difícil. Yo por suerte tengo a mi hermana, pero de haber venido sola, estaría muy asustada. Eres valiente, me agradas. —Los extraño pero necesitab