Aysel Estaba muy molesta, no solo molesta, también decepcionada. De todas las personas que pudieran darme la espalda o traicionarme, mi hermana era de quien menos lo esperaba y de quien más dolía. Podía ser problemática e incluso darle a veces muchos dolores de cabeza, pero nunca hice algo tan grave como para que me devolviera a un lugar que ambas odiábamos, uno al que ninguna deseaba volver. Sé que dijo que solo lo había pensado, pero no marcaba diferencia, si lo pensó, es porque la idea ya estaba instalada. Ella no podía engañarme, me quería fuera de su fotografía de familia feliz, se había cansado de lidiar conmigo. No sabía a donde ir, no quería ver a nadie. ¿Para qué? Para que trataran de decirme que no estaba pensando con la cabeza fría, que cuando me calmará lo veía de maner