9

991 Words

Sí, era Matías. Y no, no estaba solo. Ana alzó las cejas y me miró asintiendo con la cabeza. —El stripper, ¿no? —cuestionó. —Sí —repliqué, encogiendo los hombros y haciendo de cuenta que no me importaba, aunque en realidad estaba algo decepcionada. —Chicas, ¿qué van a tomar? —preguntó el barman. Noté que era un tipo de unos treinta años, barba puntiaguda, ojos negros y penetrantes y cuerpo grandote. —Cerveza, por favor —dijimos con mi amiga a la vez. El hombre rio y en cuestión de segundos teníamos el chopp delante nuestro. —El primero lo invita la casa, hoy es noche de mujeres —dijo el muchacho guiñándonos un ojo junto a una sonrisa picarona antes de continuar atendiendo a las otras personas. Cruzamos una mirada con mi amiga y me di cuenta que le había gustado. En realidad, a

Free reading for new users
Scan code to download app
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Writer
  • chap_listContents
  • likeADD