EYLEEN
Yo no sé en qué momento me involucre en todo esto, lo que menos quería involucrarme en estas cosas pero definitivamente creo que por más que yo trato de alejarme de las cosas malas siempre ellas vienen a mí, es como un imán que no puedo soltar y que no puedo dejar ir.
No entiendo porque tengo tanta afinidad con las personas malas que no sólo me pueden lastimar sino que también me pueden terminar matando.
Mira el hombre que está postrado en una cama y realmente es una lástima que una persona termine de esta manera, porque es un hombre bastante apuesto, se nota que tiene clase y educación y no lo digo por lo grosero que haya sido conmigo sino por los títulos que hay en una pared de la habitación, no entiendo porque las personas que a veces más estudian son las personas que más afinidad tienen por la maldad o por las cosas malas, es como que tienen un imán para hacer cosas malas, supongo que la excentricidad y todo el dinero y los lujos de alguna manera lo sigue haciendo sentir vacío, mientras que hay personas como yo que no crecimos con absolutamente nada nos ha tocado esforzarnos para tener una carrera, para lo menos tener una vida y poder sobrevivir y ayudar a los demás, otros crecen con absolutamente todo lo único que hacen es dañar a los demás.
Definitivamente este es el tipo de persona con la cual yo no quiero lidiar ni mucho menos quisiera atender y no es por el hecho de qué se dedique a lo malo, sino que es una persona que se dedica a matar a otras personas, y que quizás los planes de Dios eran que esta persona muriera y siempre y cuando yo estoy aquí dándole absolutamente todo para que esta persona sobreviva, en las manos de los doctores hay un arma muy potencial, que a la vista de muchos es algo insignificante pero a la vista mía es algo muy poderoso.
Me acerco al hombre y lo miro fijamente, realmente es un hombre muy apuesto, dormido parece un ángel al igual que su querido hermano, pero en cuanto abren los ojos y abren esa estúpida boca ahí se les quita todo lo del ángel, la Angélica lo pierden completamente.
El diablo es tan malo y puerco porque nos pone tentaciones muy grandes, disfrazan los demonios de ángeles para que todo el que lo vea por fuera no se fije en lo que hay por dentro, porque sabemos que en el fondo te están tan dañado. que no hay nada bueno en ellos, para que nos veamos venir la porquería y la escoria que son por dentro
Le pongo otra bolsa de sangre y otro cóctel de medicamentos.
Si este hombre logra sobrevivir así como pienso que lo va a hacer creo que yo sería una completa esta doctora porque yo no debería estar haciendo estas cosas pero siempre y cuando las hago y eso deja ver que logran Dra que ser en un futuro o eso quiero creer, yo sólo estoy tratando de sobrevivir en mi mundo y de poder ser la mejor versión de mí y no lo digo por mí, no lo hago por mí. Lo hago por mis padres porque tienen forzado por darme muchísimo a mí y no me parece justo que yo salga con alguna estupidez, yo me vine a la capital a estudiar y le prometí que me iba a convertir en una gran doctora, ellos juran y piensan de qué yo voy a volver al pueblo y seré la doctora del pueblo, pero definitivamente eso no va a pasar yo no tengo planes de volver a ese pueblo, me enamoré completamente de la ciudad. Yo no quiero quedarme como la Doctor cita de pueblo atendiendo cosas completamente simples como a mi me gusta la adrenalina que me da salvar vidas y jugar entre si puedo hacerlo o no lo puedo hacer.
Definitivamente tengo que dejar de pensar esas cosas porque nada de esto me va a llevar por un buen camino, me gusta jugar con fuego de maneras muy profundas y definitivamente eso no es nada bueno
Cuándo termino de poner los medicamentos al hombre bajo y trato de ayudar a las demás personas que están heridas cambiando vendas y haciendo lo posible, le mando un mensaje a mi amiga para ver cómo va su novio pero no me contesta y no sé si es una buena señal o una muy mala señal.
Voy a la cocina y tome un vaso de agua y una pastilla para el dolor de cabeza que media mente me está matando, nunca había lidiado con tanto estrés en mi vida..
Mira si la salida para ver si ya vuelve Damian y todavía no aparece por ningún lado, y no es que me importe lo que suceda con él y mucho menos, él simplemente sea dedicado a tratarme mal pero tampoco le deseo la muerte a nadie, y no quiero tener que lidiar con más heridos.
Miro una vez más hacia la puerta y todavía no se ve nadie.
— El señor debe estar bien, él es muy inteligente y sabe muy bien lo que hace.
— A mí no me importa lo que suceda con Damian.
— Yo creo que sí porque a mirado la puerta y sobre todo la entrada muchas veces.
— ¿Me estás espiando?
— La vez pasada usted se fue a caminar por los alrededores de la casa y me metí en un gran problema con el señor Damian, porque él me dio órdenes estrictas de qué no la dejara sola y me descuide que usted se desapareció hoy si le hubiera pasado algo yo sería un hombre muerto.
— Te aseguro que no serías un hombre muerto porque si yo muero a nadie le importaría y sobre todo a tu jefe, al contrario creo que estaría feliz o quizás triste porque alguien se le adelantó y eso es algo que él quiere hacer el mismo.
— Yo creo que usted tiene una opinión muy incorrecta de mi jefe, es la persona que usted cree que es.
— De lo que estoy completamente segura es de que tú no sabes quién es realmente tu jefe.
— Yo sé muy bien quién es mi jefe, yo llevo con el más de 10 años le aseguro que yo lo conozco perfectamente.
— Estoy completamente segura de qué realmente no sabes quién es tu jefe y por otro lado te diré algo querido deberías de ver un poco más allá de tus narices te darías cuenta de qué el mundo tiene colores completamente diferente a lo que tú crees
— yo estoy aquí por elección
— siendo así eso es mucho más triste y deprimente, porque el mundo es muy lindo para uno estar perdiéndoselo de esta manera, escondiéndose como ratas que ni siquiera tengas acceso a una salud digna.
— Estás son las consecuencias de la vida que yo escogí, estoy bien con eso, así como están bien todos los sobre que usted de aquí, nadie nos obligó a nosotros a estar aquí o pertenecer a esto, todos estamos aquí por elección nadie nos obligó.
— espero que seas consciente de qué tu destino al final del día va a hacer terminar muerto y que ni siquiera una linda tumba vas a tener.
— Yo eso lo tengo muy en claro y realmente no quiero una tumba quiero que me crimen y echen mi cenizas al mar.
— Qué bueno que lo tengas claro y espero que ese deseo los demás lo tengan claro que si lo hagan por ti, porque lo único que yo he visto es que a Damian no le importa la vida de ustedes
— Aunque no lo crea mi jefe daría la vida de él por cualquiera de nosotros.
— Como dicen por ahí soñar no cuesta nada y al final del día es lo único que nos queda. es como pensar ¿que haríamos si no tuviéramos fe?
— ¿Que me quiere dar entender con eso?
— Pocas palabras para un buen entendedor - le digo quitándole un ojo y dejando la conversación ahí porque siento que todo lo que yo diga no va a hacer recapacitar a este hombre de qué busque una vida completamente diferente lejos de este mundo lleno de basura.
— Yo sé que lo que usted dice no lo dice de una mala manera, es una buena doctora y seguramente un muy buen ser humano, y estoy seguro de qué es así.
— ¿Porque lo dices?
— No tenía que salvar a todas esas personas y aún así lo hizo.
— Te equivocas a mí me pagan por esto.
— Yo sé que debajo de esa frialdad hay un gran ser humano no debí haberlo hecho y aún así lo hizo su tarea era muy limitante ir a salvará mi otro jefe pero nada más.
— Para mí no hay diferencia entre un ser humano y entre otro ser humano, para mí no hay diferencia entre tu o tu jefe, la vida valen lo mismo independientemente de qué posición tengas o de qué clase de ser humano seas, eso se hace por ética profesional. No por gusto.
— Ahí vienen los carros-Dice viendo hacia fuera