Liesl tuvo que contener una risita mientras Isaías le apretaba fuerte la mano todo el camino hasta el coche. Cuando llegaron al coche, él le abrochó el cinturón de seguridad antes de darle un rápido beso en los labios y cerrar la puerta. Él rodeó el coche, y ella se preguntaba si había algún lugar urgente al que necesitaban ir, porque él estaba corriendo mientras lo hacía. Cuando él saludó al personal de seguridad, saltó al asiento del conductor y puso el coche en marcha. "¿Cómo te sientes?" preguntó mientras tomaba su mano de su regazo y la colocaba en su muslo, cubriéndola con la suya. "Estoy bien. Esta tarde con Sandy y Merlin me estresó un poco, pero estoy bien." "Ya sabía que te iba a estresar. Por eso vine a casa." "¿En serio?" "Sí. Tuve una charla con mi padre el v

