CAPÍTULO SEIS
Durante los siguientes dos días, la abuela está demasiado ocupada atendiendo a la gente que viene para curarse y, además ella y Willa se dedican a cocinar mermelada de moras, por lo que no puedo hacer más preguntas. Empiezan a cocinar temprano en el fresco de la mañana, incluso antes de que Billy se vaya a trabajar.
Voy al baño a cada rato y me duele la barriga, a pesar de que Willa me ha hecho una compresa de calor con una bolsa de goma envuelta en una toalla. No me gusta esto de ser mujer. Vimos la película Peter Pan en el cine; me gustaría ser él y no crecer nunca.
A media mañana me dejan descansar y salgo a sentarme en la plataforma que Billy ha construido para Willa. Se está bien aquí, a la sombra, con una brisa ocasional. Un par de veces, rodeo el borde de la casa de
