Después de un par de horas infernales llego al hospital donde trabaja mi padre y está mi mamá ingresada. Me apresuro al área de información —¡Amatista! —La voz de Ruth, la enfermera ayudante de mi padre me llama —El Doctor Parker me dijo que te llevara con él—Habla con premura llegando hasta mi —¿Dónde está? —Pregunto dejando que me guíe por el pasillo —Él te dirá todo—Me hace un gesto para que siga avanzando—Vamos Mientras me arrastra a el elevador no puedo dejar de repetir mi mantra. Que este bien. Que este bien Salimos del elevador en silencio y no hace falta que me siga, reconozco a mi padre sentado en una de las sillas de la sala de espera. Su rostro descansa entre sus manos y esta inmóvil. Mierda ¡No! el miedo hace cama en mi. Ruth al ver lo mismo que yo se aleja