Levanto la mirada para observar al hombre que está de pie junto a mí, encontrándome con unos hermosos ojos azules que me observan con preocupación y cariño. Lo veo ponerse de rodillas junto a mí para abrazarme haciéndome romper en llanto de nuevo. - Me partes el corazón – dice Bastián abrazándome contra su pecho. Siento que me toma en brazos para después sacarme de allí llevándome a su auto. Durante el camino me cubro el rostro con las manos y lloro tratando de sacar todo el dolor que siento en este momento. No sé cuánto tiempo pasa hasta que siento el auto detenerse y Bastián me toma en brazos de nuevo. - Gracias –digo escondiendo mi rostro en su cuello y siento que besa mi cabeza. - Puede que no me ames, pero yo siempre estaré para ti – dice haciendo que l