bc

Las dos caras del señor Wong

book_age18+
19.8K
FOLLOW
95.2K
READ
possessive
second chance
arrogant
dominant
drama
first love
secrets
multiple personality
assistant
like
intro-logo
Blurb

Daniel Wong es una persona muy importante en Corea, muy exitoso en el ámbito de los negocios, de carácter frío y Malhumorado, quien empieza a sentir suma atracción por su nueva asistente, pero un oscuro pasado y una personalidad muy agresiva lo hacen mantener la distancia, el dinero no compra la felicidad, ¿O si?,

chap-preview
Free preview
Capítulo 1.
Nota del autor: Hola, esta es una historia que me gusta demasiado, es de mis favoritas, espero que la disfruten…:), todos los derechos reservados, queda prohibida cualquier adaptación o distribución sin el consentimiento del autor, gracias. ▪️▪️▪️▪️▪️▪️▪️▪️▪️▪️ ◾1.- Apuñaló a su padrastro ◾ Daniel sintió un poco de pena al ver qué aquella joven sonreía con dulzura, "ella no durará" pensó y resopló, se concentró en su trabajo y dejó que el doctor hiciera el suyo, en aquella enorme oficina había tres personas, Daniel, Héctor, y Audrey, —Daniel, está listo—dijo Héctor, Daniel alzó la vista y miró que Héctor se acercaba, y a su lado una hermosa joven, tomó el examen médico que Héctor le había realizado a aquella chica y lo miró detenidamente, Hubiera sido mejor que se lo hiciera en privado, pero él quería estar presente durante todo el proceso. —Gracias D’angelo—dijo Daniel y miró a la joven, aquella chica era alta, delgada, de ojos grises hermosos, y piel blanca, tan blanca como la nieve, en verdad era hermosa, vestía muy presentable, él, casi se atrevería a decir que ella era perfecta, “No durará", pensó de nuevo Daniel y le ordenó que se sentara en una silla delante de su escritorio. —Estaré en mi oficina si me necesitan— dijo Héctor y se apresuró a salir. Daniel miró el currículum delante de él y lo leyó cuidadosamente, ella era joven, pero inteligente, eso era un punto a su favor sin duda, —Señorita Miller...antes de continuar...necesito que firme esto— dijo Daniel y le entregó un contrato de confidencialidad, uno muy bien elaborado, —Por favor, léelo—añadió y regresó a su trabajo, La hermosa Audrey solo fruncía el ceño mientras leía aquel contrato, básicamente ella no podía contar nada de lo que hablaran durante la entrevista, Audrey lo firmó sin pensarlo demasiado y lo puso en el escritorio, —Listo—dijo ella y dejó caer la pluma sobre el escritorio, y también aprovechó para mirar al hombre delante de ella, era un hombre guapo, de cabello negro, sin nada de barba, usaba un traje de tres piezas, tenía piel blanca y rasgos asiáticos muy encantadores, lo que más llamaba la atención, eran los tatuajes que se podían ver en su cuello y en sus manos, incluso tenía tatuajes en los costados de su rostro, parecía un tipo muy serio e imponente, Daniel la miró y ella se mordió el labio desviando la mirada hacia otro lado que no fuese él, —Bien– dijo Daniel, y se reclinó en su silla, tomó de nuevo el currículum de Audrey y resopló con fuerza, —¿Cual fue tu último trabajo?— preguntó él sin mirarla, su vista estaba fija en aquel papel, —Fue como asistente del CEO de MC industries— —¡A si! De echo él me habló de ti ahora que lo recuerdo, ¿y? …¿Por qué te despidió?— —Su esposa...ella...tenía celos—respondió Audrey no muy segura de que esa fuera una respuesta correcta, Daniel miró a la chica titubeante y sonrió, él comprendía el por qué de los celos, Audrey era una chica muy bella, cualquier mujer estaría celosa de ella, —Tienes 25 años, ¿Casada ó con hijos?— —No señor— —Este trabajo es muy demandante, no tendrás vida social ¿Eso no te molesta?— —No señor—respondió Audrey muy segura de si misma, en verdad necesitaba este empleo, —Señorita Miller... Audrey...— Daniel la miró fijamente y titubeó un poco, —Éste trabajo no es como ningún otro en el que hayas trabajado...tengo un trastorno de identidad disociativo...— confesó Daniel sin mucho orgullo, —¿Personalidad múltiple?– preguntó Audrey con curiosidad, había leído un poco al respecto, después de ver un documental, pero no conocía muy bien tal trastorno, —Sí, exactamente, más que mi asistente yo necesito...una niñera, por así decirlo— —Discúlpeme señor, pero, no le entiendo— dijo la chica y sonrió un poco nerviosa, —Estas contratada, si así lo deseas, ó eres libre de irte—dijo Daniel con tono frío y desinteresado, no pensaba explicarle nada hasta que no aceptara el trabajo, —Está bien, acepto— dijo ella rápidamente, Daniel la miró y se rascó una ceja, —Bien…— dijo Daniel y presionó el botón de su teléfono inalámbrico, —Paulette, por favor dile a Dino que venga a mi oficina— —Si señor— dijo una voz del otro lado, Daniel regresó a su trabajo sin prestar mucha atención a la chica que estaba delante de él, Audrey se encogió en hombros y miró la enorme oficina, el señor Daniel Wong era un tipo muy excéntrico, se podía ver por la decoración tan ostentosa de aquel lugar, después de unos minutos alguien tocó a la puerta, —Adelante— dijo Daniel, la puerta se abrió y entró un hombre delgado y alto, con un traje color café, parecía un hombre serio, pero sonrió alegremente al ver a la hermosa chica, —Hola, tú debes ser la futura asistente— dijo aquel hombre con una hermosa sonrisa en su rostro, —Él señor Dino es nuestro abogado, te explicará el nuevo contrato que tienes que firmar, si tienes alguna duda, él té responderá— aclaró Daniel mientras se ponía de pie, solo entonces Audrey pudo ver al hombre en su máximo esplendor, y se sintió ligeramente acalorada de verlo tan de cerca, era un hombre delgado, pero de buen físico, era un hombre que inspiraba terror, pero que al mismo tiempo despertaba el deseo y el interés, —Dino, por favor encárgate, tengo una reunión justo ahora, así que estaré fuera por un momento— Dino solo asintió y le pidió a la joven que lo acompañara a la sala que estaba en una esquina de aquella enorme oficina, los sillones negros eran para tres personas, eran muy bonitos y costosos, había una mesa de cristal en el centro, con un florero lleno de flores recién cortadas, también había una barra pegada a la pared de color blanca, encima tenía una cafetera, un microondas, y en la parte de abajo un refrigerador, todo parecía nuevo y limpio, había unos estantes con vasos de vidrio, copas, y botellas de licor, todo muy bien ordenado y en perfecto estado, —Señorita...—dijo Dino sin poder terminar la oración, —Miller... Audrey Miller— —Señorita Miller, por favor lea esto, y si está de acuerdo firme al final y también ponga su nombre— Ordenó Dino y le entregó unas hojas, Audrey comenzó a leer y luego miró a Dino, —Esto...—Audrey suspiró y prefirió no indagar, ni comentar nada aún, después de todo, estos millonarios eran muy raros, firmó la hoja, y así fue con las demás, y mientras leía ella abría mas y más la boca, totalmente sorprendida, —Señor Dino… ¿Que tipo de trabajo es este?— preguntó muy confundida, —Mira... Daniel es un empresario muy importante, está entre los cinco más ricos del país, pero debido a su trastorno él...él necesita supervisión, no Daniel, sí no, él otro tipo, Charles...— —¿Su otra personalidad?— interrumpió Audrey —Si, exactamente— —Pero...¿Por qué?— —Daniel tuvo una niñez muy complicada, era callado y asustadizo, su padre el señor Ling Wong, falleció cuando Daniel tenía 6 años, y su madre se vino a vivir aquí a Corea, y bueno, ella se casó después con un hombre, un empresario no muy influyente, Daniel heredó todas las empresas de su padre fallecido, pero era muy joven y su madre las administraba, muy mal, para ser honestos...bueno, en fin, Daniel era golpeado por su padrastro, inclusive dejó de ir al colegio, estudiábamos juntos y él siempre llegaba con heridas nuevas y con excusas tontas, cómo qué: se cayó de la bicicleta, o qué se tropezó, etc. Y su madre...bueno, ella era un desastre, también fue golpeada y abusada por su nuevo esposo, e incluso por amigos de su esposo...fue algo muy desagradable— —Qué horror– dijo Audrey mientras procesaba la información, debió de ser una infancia muy horrible, — Entonces apareció la personalidad de Charles, un tipo de 29 años que cuidaba al pequeño Daniel, este tipo apuñaló a su padrastro cinco veces en el estómago y también a su madre, Daniel estuvo en un hospital mental... hasta que cumplió 13 años, mi padre era un muy buen amigo del suyo, y también se convirtió en su protector, con mucha ayuda, Daniel regresó a la escuela, es un tipo muy listo, no tuvo ningún problema, pero Charles se quedó, es muy problemático y también agresivo, él se mete en problemas y Daniel paga las consecuencias, y ahí es donde entras tú, debes cuidar a Daniel, que tome sus medicamentos, que se alimente a sus horas, que no se estrese, que no se enfade, y que duerma como debe de ser, y si Charles aparece, debes cuidar que no traiga mujeres a casa, se vuelve muy sádico cuando está en casa, mientras esté fuera, estará bien—dijo Dino mientras sacaba dos botellas de agua del pequeño refrigerador, le entregó una a Audrey y tomó asiento de nuevo, —Bien, entiendo...pero aquí dice que no puedo demandar en caso de agresión y...— —Señorita Miller, hay algo que Daniel especificó que usted entendiera, la última asistente lo demandó por agresión sexual, Daniel tuvo que pagar mucho dinero, su asistente sabía lo peligroso que era y aún así aceptó, aunque no justifico la agresión por la que pasó, tampoco puedo ponerme de su lado— —¿Agresión sexual?, ¿Tan peligroso es?— preguntó Audrey un poco asustada, —Si—respondió Dino con sinceridad, —Charles lo es— aclaró, —Daniel por otro lado, es una muy buena persona— "Cielos", pensó Audrey y se quedó en silencio por un rato, bebió de su botella de agua y miró hacía ningún lado, pensando en: si valía la pena el trabajo, —Antes de que sigas pensando...estos serán tus honorarios, este no es un trabajo fácil así qué...es bien pagado— Dino le dio una hoja y Audrey abrió los ojos como plato, se recargó en el sillón y siguió pensando, finalmente se enderezó y firmó la última hoja, si no fuera por qué su madre estaba muy enferma de cáncer y necesitaba pagar el seguro médico, ella se hubiera reusado a aceptar, nadie en su sano juicio aceptaría… pobre chica se veía tan inocente y pura, Dino solo asintió pero no estaba contento, más bien estaba un poco angustiado, miró su reloj e hizo una mueca, —Oh, ya es hora de almorzar, ¿Que te parece si vamos con el doctor D’angelo y vamos a comer algo?, me muero de hambre— —Claro— dijo Audrey y sonrió, Dino se apresuró a juntar los papeles y ambos salieron de la oficina, caminaron por un pasillo ancho, junto a grandes ventanales, había algunos cubículos, parecía que el personal se había ido a comer, había más oficinas, y al final llegaron a un cubículo, una mujer como de 30 años los miró y sonrió, —Señor Bartolini, ¿Cómo está?– preguntó la mujer mientas agarraba su bolso, —Hola Suan, estoy bien ¿Héctor está en su oficina?– Preguntó Dino educadamente, —Si, aún está aquí— —Gracias, voy a entrar—dijo Dino y se acercó a tocar la puerta, entró a la oficina y Héctor estaba mirando su teléfono, Héctor pudo visualizar a la hermosa chica y sonrió, —¡Te quedaste!— dijo él un poco sorprendido y a la vez emocionado, —Si, así es— respondió ella un poco tímida, Héctor D’angelo era muy guapo y tenia rasgos muy masculinos y atractivos, era alto, de cabello oscuro, y con muy buen físico, su tés un poco bronceada lo hacía resaltar de los demás, y le quedaba bastante bien, era un hombre que no pasaba desapercibido de los demás, —Oye amigo, vamos a comer juntos, y le explicas a Audrey un poco lo que tiene que hacer— —Si, por supuesto, vamos—dijo D’angelo con una voz grave y seductora, los tres llegaron al estacionamiento y se subieron al carro de D’angelo, el cuál era un BMW de color negro, y se dirigieron a un restaurante muy lujoso. ………… Daniel bostezó con fuerza una vez que entró en su oficina, no miró a nadie y se sentó en la silla de su escritorio, después de sacarse el saco de su traje, se aflojó un poco la corbata y sacó una cajetilla de cigarrillos de uno de los cajones de su escritorio, sacó uno, y tomó un encendedor de su bolsillo, se recargó en su silla mientras fumaba y sonrió al recordar algo, continúo fumando y luego puso la colilla en un cenicero, se frotó la cien y enrolló las mangas de su camisa blanca de vestir hasta los codos, se levantó de su silla y miró por la enorme ventana que estaba detrás de él, metió las manos a sus bolsillos y miró el paisaje por unos minutos, una lágrima corrió por su rostro pero él no le prestó atención, y solo continúo mirando por la ventana.

editor-pick
Dreame-Editor's pick

bc

Bajo acuerdo

read
7.6K
bc

Navidad con mi ex

read
8.7K
bc

Mi Sexy Vecino [+18]

read
50.0K
bc

Prisionera Entre tus brazos

read
85.8K
bc

La esposa rechazada del ceo

read
163.5K
bc

Tras Mi Divorcio

read
509.0K
bc

Yo, no soy él

read
88.1K

Scan code to download app

download_iosApp Store
google icon
Google Play
Facebook