Michael -¿Estas lista fosforito?-dije besando la cima de su cabeza. -Aunque me gusta tenerte con los ojos vendados, es muy excitante. -Si vas a empezar de nuevo con tus insinuaciones, me sacaré la venda- ella podía ser ruda cuando se lo proponía y era algo que jodidamente me encantaba. -¿Puedes culparme? Estamos en casa, solos y te tengo entera a mi merced- comencé a a pasar mis manos por sus desnudos brazos, agradeciendo que llevara puesto el vestido de tiras. -Michael aún no vi la sorpresa ¿Puedes esperar un poco más?- pero mientras escuchaba sus palabras, deje suaves besos en su cuello. Su piel era tan suave, quería adorarla hacerla sentir todo el amor que podía darle y esta vez lo haría bien. Cuando fosforito dejo salir su aliento en un suave gemido, estaba totalmente perdi