No había recibido ninguna noticia sobre los pagos, pero no me atreví a llamar y preguntarle nuevamente a Eloise estando Arthur en la misma habitación que yo, puesto que ella debia estar bastante ocupada como para tener que solucionar los problemas de la esposa de su jefe; sin embargo, no quise quedarme con la duda y decidí que yo misma iría a preguntar a la empresa para saber qué podíamos hacer antes de que la administración del hospital se viera en la penosa necesidad de decírselo a Arthur.
Al siguiente día y siguiendo mi rutina normal, pensé que podía excusarme con Arthur diciéndole que tenía una cita con el psicólogo y así librarme de él por lo menos una hora, tiempo que utilizaría para ir a la empresa, más ya no con Eloise, sino que iría directamente al departamento de finanzas para h
