Helena Ese instante lo guardaría por siempre en mi memoria, él recostado a un lado de mi, su respiración suave por encima de mi cabello estremeciendo mi cuerpo y sus brazos envolviendome, su agarre era delicado pero sentí que no había nada en la tierra qué pudiera separarnos y después de todo el sufrimiento qué ambos pasamos, sus heridas y las mías, sospeche qué en verdad nuestro amor había cambiado, no era el mismo. Ahora era más maduro,fuerte, honesto, devoto y fiel. Se notaba en sus besos y en sus caricias, en los suspiros qué ambos dejábamos escapar de vez en cuando. No recordaba con exactitud cuando había sido la última vez en que mis labios formaron una sonrisa sincera o si quiera la última vez que me habia sentido feliz, últimamente todo había sido lágrimas y sufrimiento pero sosp