El policía observó la desesperación de Javier con preocupación. No pudo evitar acercarse a él y darle un poco de agua para tranquilizarlo. —Pero ¿qué le pasa? —le preguntó con el ceño fruncido. Como el muchacho no podía responder, Esteban fue quien habló. —Es su novia la que está en ese piso… —¿Novia? —repitió el hombre sorprendido, Márquez asintió. El oficial volvió a alejarse, hablando por el intercomunicador con los agentes que se encontraban dentro del hotel. Nadie entendía nada, Javier no sabía por qué el hombre había reaccionado de esa manera, no paraba de hablar con expresión preocupada y, al mismo tiempo, cargada de asombro. —Voy a averiguar qué está pasando —dijo su padre al final—. Se puso raro cuando dijiste que tu novia estaba ahí… El joven asintió mientras intentaba cal