23

1961 Palabras

Lo miro con expresión interrogante y él acaricia mis mejillas con suavidad.  —Primero, ¿se darán cuenta tus padres si te secuestro un ratito? —pregunta. Me río y hago como que pienso.  —Si no entro a la casa, no se van a dar cuenta de que llegué —replico acercándome un poco más a él. —Bien. Y segundo, ¿será que podés dejar de ser tan hermosa por un minuto? Es que me estoy muriendo por besarte.  Y sin darme tiempo a responder, su boca se une con la mía. Ahí, al aire libre, como si él no estuviera comprometido y como si no estuviéramos corriendo ningún riesgo siendo expuestos. A mí poco me importa, enseguida me trepo de sus hombros y lo atraigo un poco más hacia mí mientras él sostiene mi cintura.  —Vámonos —dice—. Tengo el auto, y tengo plata, podemos irnos ahora, ya mismo, y desaparec

Lectura gratis para nuevos usuarios
Escanee para descargar la aplicación
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Autor
  • chap_listÍndice
  • likeAÑADIR