El lugar favorito de retiro de Tristán Ruíz de Con cuando tenía algo que pensar, era el mismo desde hace más de diez años, uno que le traía los mejores recuerdos de cuando vivía en la ciudad y que cuando sus hijos estaban pequeños solía traerlos para pasar tiempo con ellos, ese lugar era el Bosque de Chapultepec, donde años atrás su madre Lucha y él habían caminado y platicado sobre todo lo que le deparaba el futuro. Tristán, al morir ella, había decidido esparcir sus cenizas debajo de un árbol, el mismo al que se habían sentado a la sombra ese día. Así que ahora, que se sentía desorientado, había recurrido a ella como siempre lo hacía para que le diera una consejo para poder guía de nuevo su camino. Cuando Luz llegó, su padre se encontraba sentado recargado sobre el tronco y cerrando