Dos días después: 17 de diciembre El fallecimiento de Gerardo ha sido todo un acontecimiento en el pueblo y por consecuencia nadie ha querido ausentarse en su sepelio. No voy a negar que me siento un poco extraño en medio de toda esta situación, y es que en verdad lo conocía hace muy poco. Sin embargo, Caeli me ha pedido que no me moviera de su lado y eso es lo que hago. Escucho a cada persona que se acerca dándole su pésame y viéndome como de forma extraña tal y como si fuese un extraterrestre o algo así. Supongo que es simplemente porque no me conocen, o puede que estén preguntándose quien rayos soy. Sea como sea, solo la acompaño y trato de apoyarla en lo que necesite. […] Afuera ya es de noche cuando finalmente entramos a la casa principal, y por mi parte, solo la acompaño para des

