[Alessandra] Al escuchar que Nicolas estaba al otro lado de la puerta no supe qué pensar, me sentía confundida porque no entendía cómo había logrado llegar a casa de mis padres, ¿será que había logrado seguirnos el día de la consulta? Intenté mantenerme los más serena posible, pero la verdad es que mi corazón latía agitado y cuando iba a decirle a Greta que le pidiera que se fuera, apareció mi padre y se hizo cargo de la situación. Cuando le abrió la puerta, me paré lo más rápido posible que mi panza me lo permitía y caminé hasta detrás de una pared, no precisamente para esconderme, sino para poderlo ver y no él a mí, cuando entrara. Lo escucho entrar y siento cómo se me hela la sangre. Me asomo con cuidado y mientras él mira confundido hacia el otro lado, me pierdo en su rostro