Narra Ezel: Balada era el nombre del condenado poema que esta obstinada mocosa, me había enviado , sí ,me estaba volviendo loco y lo único que quería era besarla hasta que el sentido común entrara en esa cabeza suya y se diera cuenta de que ella era la única persona a la que yo quería, nadie más. Suspiré agotado, cansado, frustrado de todo lo que estaba pasando, necesitaba mi ancla, la necesitaba a ella. -Ve a dormir un poco- yo me quedaré con tu padre- dijo mamá a quien los moretones se le estaban notando más-Yo me quedaré con tu padre. -No mamá, necesito estar aquí. -No hay nada que puedas hacer, Elijah está en las mejores manos, y solo podemos esperar que el dolor de su cuerpo vaya disminuyendo con los días. Ve a dormir que mañana tienes que ir nuevamente a la oficina. -Está bien