Camilo
Mateo llegó un poco tarde y apenas pude saber que era porque le habían dado de alta a su hermana. Realmente me sentía decepcionado, no podía creer que toda su perseverancia se había muerto en el momento que cayó desplomada al suelo durante el clásico femenino.
Me sentía mal. Yo se que suena tonto pero así como me había enamorado de ella por sus acciones, también me había decepcionado por ellas.
Si, enamorado. Mi corazón se dio cuenta de que lo que sentía era amor, justo el día que decidí hacer el último intento por hacerla reaccionar, sin poder lograrlo. No sirvió de nada ir… no le importó nada.
La cadena de aplausos de los presentes me distrajo de mis ejercicios de calentamiento… levanté mi cabeza y vi a Javier unirse al aplauso así que miré haciéndome sombra con mi ma
