Capítulo 14. Más carácter.

1226 Palabras
Después de comer, los niño*s se bañaron y se fueron a la cama, y mientras que Asher preparaba la cama de huéspedes, Bastián se daba un baño, Asher trataba de mantener la cordura, esto no significaba nada, ¿Cómo debía de ver a Bastián?, ¿Cómo su jefe?, ¿Cómo su amigo?, ¿Cómo su pareja s****l?. Los colores se le subieron al rostro mientras qué su corazón empezaba a latir rápido, se sentó en la cama y resopló. Bastián le gustaba, le gustaba mucho, pero si se lo decía, entonces….todo iba acabar, ¿Verdad?. —Ya puedes bañarte. Asher pegó un salto y se puso de pie, se acomodó el cabello y asintió. —Si, la cama está lista, yo…dormiré en la recámara de mi hermana… —Estas loco, le tengo miedo a la oscuridad y a los lugares desconocidos, no podré dormir si me dejas solo. Asher lo miró, Bastián estaba muy serio, ¿Hablaba en serio?. —¿Estás bromeando?. —No, báñate y ven aquí, o voy a ir por ti. Bastián decía aquello con una autoridad qué hacía sentir a Asher qué aún estaban en el trabajo. Parpadeo incrédulo y sonrió. —Está bien. Bastián lo miró salir y sonrió, no tenía ropa, así que Asher le prestó unos pantalones y una camisa, se vistió y se acostó en la cama, mientras esperaba a Asher un teléfono empezó a sonar. Se levantó a buscar, era el teléfono de Asher, frunció el ceño al ver quien lo llamaba, no se detuvo a pensar si estaba bien o mal estar de fisgón, y sin más preámbulos. Solo respondió. —¿Qué quieres?—Preguntó Bastián. —¿He?...¿Quién habla?. —¿Por qué molestas a Asher a estas horas?. —Jaja…aaaa, Bastián, mmm, bueno, solo quería escuchar la voz de mi querido Asher, ¿Qué haces tú con él a esta hora?. Bastián cerró los ojos tratando de calmar ese sentimiento tan desagradable dentro de él. —¿Qué no sabes que está conmigo?. —¿En serio?, no me ha dicho nada de eso. —Víctor, ¿Debería de hablar con tu pareja?. —Inclusive eso sería caer muy bajo para ti. —En serio Víctor, ¿Qué es lo que haces?. —Solo te estoy molestando, no creo que deberías de contestar el teléfono de Asher, o acaso…¿Ya son tan unidos qué él te lo permite?, miré un estado qué publicó su hermana y quería saber si él estaba bien, si ocupaban algo, eso es todo. —¿Conoces a su hermana?—Preguntó Bastián un poco celoso. —Si, ¿No te lo dije?, que distraído soy, en fin, lo llamaré después. —Oye, no cruces los límites Víctor. —¿Asher es tu novio?. Bastián apretó la mandíbula y resopló. —No, pero está conmigo. —Mmm, de acuerdo, nos vemos luego. Bastián colgó y dejó el teléfono, de pronto tenía muchas ganas de fumar, pero estaba en una casa ajena, se recostó en la cama y cuando miró entrar a Asher se sintió muy alterado. El cabello rubio de Asher estaba mojado y revuelto, mientras que su piel blanca se veía limpia y fresca, olía a jabón de baño y solo usaba una camisa blanca y unos shorts azules qué le llegaban a la rodilla. —Estoy agotado— dijo Asher sin darse cuenta de como Bastián lo miraba. —Entonces ven a la cama a dormir. Asher asintió, apagó la luz y fue a la cama, se recostó con calma y suspiró, de pronto sintió como los brazos de Bastián lo envolvieron mientras que sus labios empezaban a recorrer su cuello. —Hoy no podemos, los niño*s están aquí. —Lo sé, no hagamos ruido— dijo Bastián mientras metía sus manos debajo de la camisa de Asher y acariciaba su pecho. Asher empezó a sentirse inquieto, sujetó las manos de Bastián y negó antes de que no pudiera detenerse. —No podemos. —Ahg, está bien, entonces durmamos ya— dijo Bastián y lo abrazó con fuerza. Asher suspiró y cerró los ojos. —Buenas noches. —Buenas noches— dijo Bastián sintiéndose algo diferente, aquella sensación de calidez, le gustaba. “Esto…tal vez…tenga qué parar”. A la mañana siguiente Asher se levantó muy temprano, tenía que alistar a los niño*s para llevarlos a la escuela, eso fue lo que le dijo su hermana ya qué darían de alta a Peter hasta las 10 de la mañana, así que Asher tenía que llevarlos, y los ayudaba mientras que Bastián preparaba el desayuno. Bastián estaba tan concentrado haciendo unos huevos revueltos qué no se había dado cuenta de la niña que estiraba su pequeña mano para tomar un poco de tocino. Cuando Bastián la miró sonrió y le dio uno. —Muchas gracias— dijo Mila. —¿Ya tienes hambre?. —Si, ¿Puedes darme un poco de leche con chocolate?—Preguntó Mila. —Está bien, la prepararé enseguida. Asher salió de la habitación y al ver a Bastián platicando con Mila y dándole de comer, pensó que sin duda Bastián se vería muy bien siendo papá. Trató de no volverse loco y fue a peinar a Mike quien no podía arreglar su cabello. Dejaron a los niños en la escuela y solo hasta entonces Asher respiró aliviado. —No sé como mi hermana hace esto todos los días. —Las personas se acostumbran a todo, menos a no comer y a no tener se*xo. Asher miró a Bastián y se aclaró la garganta. —Gracias por ayudarme. —Ni lo digas, vayamos al trabajo ahora. Asher miraba a Bastián mientras conducía, era perfecto, ¿Cómo podía no tener ningún defecto?. —Tal vez esta noche, podamos salir a tomar algo—Dijo Asher un poco emocionado de poder salir con Bastián en una cita. —Mejor no, estaré ocupado esta noche, me quedé de ver con alguien. —¿A si?, ¿Puedo saber con quien?. —No seas curioso. Eso fue todo lo que Bastián respondió. Asher se sintió un poco decepcionado, Bastián si podía acercarse y meterse a su vida, pero cuando él intentaba entrar a la de él, recibía un rotundo no. “Debería de tener más carácter”, pensó Asher. Esa noche regresó a su departamento algo derrotado, no había podido estar con Bastián íntimamente, y ahora se sentía algo estresado, se metió a la ducha y no pudo evitar pensar en él, así que sin pensarlo mucho, empezó a masturba*rse tratando de sentir algo de paz. Su cuerpo reaccionaba con la sola imagen de ese hombre, se sujetó con fuerza de la pared y gimió cuando logró eyacula*r. Respiró hondo y se enjuago sintiéndose un poco pervertido. Una vez que salió del baño, se secó el cabello y revisó su teléfono, no había ningún mensaje, así que esta vez, decidió enviar uno él. 《Duerma bien, y no sueñe conmigo o no podre descansar》. Envío aquello y se sintió algo tonto, iba a borrarlo, cuando miró qué Bastián estaba respondiendo, lo que quería decir que ya lo había leído, había sido muy rápido. 《No te prometo nada, descansa》. Asher sonrió y se dejó caer en su cama, sin duda esto…pintaba para ser una hermosa historia de amor.
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