Hablando de malas ideas, Silvana miró a Clara, la niña que le lanzó una piedra frente al lago y después a Denis – esto es… – Un viejo carruaje, alteza – respondió la madre de Clara – prácticamente nos lo regalaron porque no tenía caballos. Elsa se adelantó – usaremos esto como servicio de entrega y lo mantendremos oculto en el depósito y cubierto por mantas. Era una posibilidad – los caballos, ¿de dónde saldrán? – Alquilados – respondió Denis – el dueño presta poca atención a los rostros de sus clientes, alteza, sí evitamos el puente llegaremos a la ciudad por la entrada norte, agregaremos dos horas de camino. Silvana negó con la cabeza – estamos en el sur y la mayoría de las personas que quieren esconder algo lo hacen usando la dirección contraria, sí entramos por el norte será muy o