El cielo sobre el palacio de oro se volvió oscuro, con grandes y pesadas nubes que escupían relámpagos. Frente a la amenaza de Océano, Celestial respiró ruidosamente – sí es lo que tanto deseas, desde hoy separaré la ciudad bajo el agua del resto de Verium, tú y todos tus hijos podrán vivir en la autonomía que tanto deseas. Océano no se mostró presionado – ha sido así desde el comienzo, Dimensional creó melros para unirnos y tú lo usas para separarnos, pero ya no lo necesitamos, entre nosotros hay una diosa con el poder para conectar todas las casas, sin restricciones y sin tu intervención. – ¡Kareydanel! – pensó Tempestad, quien hasta ese momento había guardado silencio – ese sendero es inestable, se mueve en espacio y en tiempo, literalmente podrían enviarnos al comienzo de la creació

