Y el sexto ángel tocó la trompeta, y oí una voz que salía de entre los cuatro cuernos del altar de oro que estaba delante de Dios, diciendo al sexto ángel que tenía la trompeta: Desata a los cuatro ángeles que están atados en el gran río Éufrates.
Apocalipsis 9: 13-14.
David
No creí que Ethan sacaría esa oscuridad, pero cuando le respondió de esa forma a su propio padre sentí que me veía a través de él, tenía la mirada de un demonio, lo que demostraba sin lugar a duda que era un Wintar con todas sus letras y sé que en su momento, deberé sacar esa misma oscuridad de él para que su demonio y el mío sean los que logren salvarla, y de paso, sacarnos a todos de aquí con vida.
Nos instalamos en la base de Përmet; Albania, tras esa acalorada discusión no volvimos a dirigirnos la palabra a men
