Dreik Black, fue hasta su despacho . . .
El primero en recibir intercambio fue él . . .
Juan Giova ya había lidiado con los problemas y su agente ya estaba trabajando en ello . . .
Por lo pronto fue hasta el despacho en donde le informaron que estaba su jefe y llegó con un nuevo teléfono adaptado con un bloqueo de señal . . .
Nadie podría filtrar su teléfono . . .
Solo hasta que le dieron el primer informe de la base, Juan Giova pudo entender porque su jefe había mandado a limpiar los teléfonos de todas las personas a su alrededor . . .
No sabía. como su jefe llegó a esa conclusión pero tenía razón, todos los teléfonos, incluso de las empleadas de servicio, estaban interceptados . . .
- Jefe . . . - Juan Giova entro con una carpeta y el celular nuevo . . .
Tomo el celular de Dreik Black que estaba sobre el escritorio y espero a que su jefe se gire ya que estaba sentado en la silla y le daba la espalda al escritorio y a él . . .
- ¿ Terminaron ? . . . - Fueron las palabras de Dreik Black al escuchar la voz de su subordinado más fiel . . .
Sin embargo, no se dio la vuelta . . .
Juan Giova se sintió impotente, en realidad tenían la base de tecnología más avanzada del mundo, cubrían aún tareas y misiones élites, pero apenas habían podido filtrar la información de intercepción . . .
Parecía haber sido el trabajo de un hacker más avanzado . . .
- Jefe . . . - A Juan Giova, le temblaron las pelotas . . . Y, las manos . . .
- En realidad, apenas y pudimos descubrir que todos los teléfonos de los empleados y de la familia, incluidos los señores Black estaban chuzados . . .
La persona que se encargó del trabajo parece ser muy hábil . . .
Jefe, ya limpiamos todos los teléfonos, pero hemos cambiados los dígitos y estamos creando la red de bloqueo . . .
No se preocupe para el amanecer todo estará en orden . . . -
Dreik confiaba ciegamente en su personal . . .
Pero ahora que sabía algunas cosas y deducía otras . . .
Hubiera sido increíble si ella trabajará de la mano con él . . .
Eso de verdad, hubiera sido increíble . . .
- Eso espero, ahora retiráte . . . -
Dreik Black tenía otras intenciones ese día, por lo que quizá permaneciera encerrado en su despacho por mucho tiempo . . .
- Jefe . . . - Juan Giova quiso decir algo, pero me dolía la lengua al hablar . . .
Su ceño se frunció y miro al hombre que lentamente se giraba para dedicarle una mirada fría y penetrante . . .
Todas las palabras que Juan Giova, intentaba decir, fueron tragadas por esos ojos oscuros . . .
Juan Giova suspiro suavemente . . .
¡ Él es un jefe tan importante ! . . .
Nadie le creería si dijera que el gran jefe había cancelado millonarias reuniones por dedicarse a leer un libro que pertenecía a la esposa fugitiva . . .
Tendría que estar muy loco, pero era cierto . . .
En ese momento, Juan Giova recibió un llamada, el auricular en su oreja reprodujo el sonido de la voz y luego de afirmar, se cortó la comunicación . . .
- Jefe, ya todo está arreglado, pero me informan que no pudieron rastrear la dirección de donde venia la intercepción . . . - Juan Giova se detuvo un momento seleccionando sus palabras . . .
Pero antes de decir algo, se escuchó la voz cantarina y alegre de su jefe . . .
- Por su puesto . . . -
- Jefe . . . ¿ Usted sabe quién fue ? . . . -
Por supuesto que Dreik Black ya lo sabía . . .
Los ojos del hombre alumbraron con una profunda maldad, mientras que Juan Giova solo pensaba en reclutar a esta persona, su trabajo había sido meticuloso e increíble . . .
Sus hombres tuvieron que trabajar a toda máquina y aún así les costó un poco encontrar el origen . . .
Su jefe ya sabía quién era . . .
¿ No era mejor ir por esa persona y ponerla de su lado ? . . .
todavía tenían algunas misiones en sus manos, si esta persona trabajaba para ellos, todo se resolvería en un menor tiempo que les tomaba con su gente . . .
Dreik miro por el gran ventanal de su despacho y noto que apenas se estaban esclareciendo las primeras nubes en el cielo . . .
- Buen trabajo . . . - Fue lo que dijo el hombre antes de ajustar el libro en sus manos y ordenar a su subordinado . . .
- Vamos, tenemos una agenda que cumplir . . . -
Con esto en mente, Dreik Black, envío un corto mensaje de su nuevo número y pronto tuvo una respuesta . . .
" - ¿ Con que derecho ? . . . - "
Fue una respuesta igual de corta, pero que fuera respondida enseguida, hizo que el humor de Dreik Black ese día, fuera inalcanzable . . .
- Vamos hombre, muéstrame que hay para hoy . . . -
Juan Giova se quedó de piedra . . .
Para que su jefe lo llamara de tal forma, era porque no estaban en el rol de jefe y empleado . . .
Y eso pasaba cuando las cosas se ponían muy serias y salían a beber algo . . .
Ahora no estaban en ninguna de estas dos ocasiones . . .
¿ Que paso con su jefe ? . . .
Dreik Black al ver el parpadeo de su hombre de confianza, entendió lo que pensaba . . .
- No te preocupes, pronto tu querida cuñada estará de vuelta . . . -
Las palabras de Dreik Black, dejaron aún más perplejo a Juan Giova . . .
¿ Como fue que llegaron a ese tema tan rápido ? . . .
¿ Y que quería decir, con que su cuñada volvería pronto ? . . .
- Jefe . . . ¿ No cree que debe descansar un poco ? . . . - Juan Giova llegó a la conclusión que todo lo que estaba pasando había fechado a su jefe, de una manera No tan positiva . . .
La mirada de Dreik Black se oscureció, formando una terrible zozobra a su lado . . .
Juan Giova trago profundo y su voz se volvió débil . . .
- Jefe, tenemos una reunión a las 7:00 am en punto con el señor Franco y su hijo Frank Merchetty . . . -
- Muy bien, entonces reserva en el mejor restaurante de la ciudad, y complace a mi . . . -
Las palabras de Dreik Black se saborearon en su boca antes de ser expulsadas . . .
- Solo que todo esté según sus deseos . . . - La mirada del hombre era afilada y tempestuosa . . .
Nadie podría adivinar las intenciones de Dreik Black en ese momento, pero era claro que no eran tan malas, ¿ O quizá si ? . . .
Como se predijo, nadie podría saberlo . . .
En todo caso, Juan Giova estaba feliz de que su jefe hubiera vuelto a lo que era, un despiadado sin sentido, pero también un hombre calculador y meticuloso . . .
Ahora Juan Giova estaba feliz de volver al trabajo serio . . .
- Enseguida jefe . . . - Juan Giova se puso a coordinar todo mientras veía la sonrisa de su jefe.
Esta era mucho más tenebrosa que su seriedad.
Ahora no pensaba que algo bueno estuviera sucediendo.
El coche se alistó en la puerta de la mansión, escoltado por dos camionetas más, que saldrían con destino al sur de la ciudad.
Les tomaría prácticamente una hora y media, en llegar al lugar de reserva.
Todo estaba según los gustos de los hombres Merchetty.
Durante el camino Juan Giova miro como su jefe acariciaba . . .
¿Acariciaba?
Lo cierto, era que así acariciaba la pasta del libro arrugado y un poco viejo, parecía más bien una posesión de algún anciano que de una joven y bella mujer.
Pero lo que importaba para Dreik Black era la valiosa e importante información que tenía dentro.
- Lo haré . . . Con todo el derecho. - Fue casi un susurro, pero Juan Giova lo escucho y la piel se le puso de gallina.
Parecía que lo que venía, no era nada, pero nada bueno . . .