Artemisa no podía creer que las dos mujeres que han estado en la vida de los gemelos se encontraban paradas enfrente de ellos con sus miradas cargadas de odio y recelo, por lo que ella se limitó en acercarse mucho más a los dos hermanos para sentirse un tanto protegida. Sasha notó lo que estaba haciendo, por lo que sonrió de lado de forma maquiavélica y comenzó a hacer algo que iba a enojar a la susodicha. — Pero que modales los míos — negó con su cabeza y se acercó a cada una de las personas para darles un beso en la mejilla — No los saludé cuando llegué — Primero empezó con Pablo y Tomás, después con Apolo y al final con Ares — Tanto tiempo sin verte Aresito, ya te extrañaba – Hizo un puchero de lo más falso hacía él. La boca de Sasha impactó con la mejilla de Ares en un beso un tant

