—Tiziano, ¿cómo te encuentras? — le pregunto apenas él me responde.
—Afortunadamente bien señor, yo tan solo me he llevado algunos leves golpes, usted fue quien recibió la peor parte— me dice haciéndome sentir un poco mejor, y es que al menos un tercero no ha sufrido las consecuencias de lo que me están queriendo hacer a mi o a mi esposa.
—Me alegra saber que estas bien, sabes… no es la primera vez que a mi esposa o a mi intentan matarnos de esta manera, es más a mis suegros los mataron así— le explico y con solo recordar todo esto, se me eriza la piel… tanto mi esposa como yo hemos terminado en esta situación a causa de alguien que altero los frenos del auto donde íbamos.
— Siento mucho escuchar eso, de Seguro esa persona lo hizo mientras que estábamos en el bar— me dice y si, lo más
