Ismael Varias horas han transcurrido desde que Oz la sedó, mismas horas que los he acompañado mientras él le hacía algunos exámenes y esperábamos a que despertase, aunque mil ideas pasaban en mi cabeza sobre lo que pudo ocurrirle para terminar con TEPT y el qué lo desencadenó con exactitud, para colmo Oz no quiso decirme o darme detalles de su diagnóstico, solo me pidió que la acompañase y le avisara si ocurría cualquier cambio en ella. Asimismo, y a pesar de todo, estas horas me sirvieron para darme cuenta de que ella me importaba más de lo que quería admitir y era obvio que mi hermano se había dado cuenta desde hacía mucho, pero… ¿En qué nivel es importante para mí y por qué? —¿Qué me hiciste? —acaricié su rostro sin soltarle la mano cuando de pronto ella comenzó a despertar—. ¿Perla?