SOFÍA —¡Oye eso es trampa! —le chilló Chloe a John en mitad de una partida a la videoconsola. —Eso se puede hacer —él le sacó la lengua y ella le lanzó un cojín a la cara. Nick me miró y nos empezamos a reír hasta que él me lanzó a mi otro cojín y empezamos una guerra los cuatro. Ese día me había despertado y Chloe ya estaba fuera de casa esperándome para pasar la mañana juntas en la piscina de su casa, y Nick llegó poco después para jugar con John; al final nos unimos los cuatro. Sabía que Hunter trabajaba toda la mañana, y aunque se me hizo raro no tenerlo rondando, estaba integrada con mis (ya no tan nuevos) amigos. Por la tarde era mi primera sesión de fotos y llevaba un par de días nerviosa, por eso Chloe había aparecido a primera hora por casa de los abuelos para pasar un tiempo