SOFÍA —Tsss, Sofía —me susurraron, y alguien jugó con mi pelo logrando despertarme—. Sofía... Abrí los ojos lentamente y estuve a punto de chillar cuando vi la cara de Hunter tan cerca, tan dormido. Había dormido con él y me había encantado. Tenía su brazo rodeándome la cintura y su otra mano se agarraba a la mía cerca de su cuello. Era adorablemente atractivo. Y lo había besado. Chloe me dio una palmada en el culo y temí que Hunter se despertara, así que la miré y vi que ya estaba peinada, maquillada, y vestida. Me froté los ojos y quise volver a reposar sobre el cuerpo de Hunter, pero no lo hice porque eso ya era demasiado hasta para mí. —¿Qué pasa? —pregunté adormilada. Sonrió a lo grande y me dio miedo. —Vamos a desayunar, tengo que contarte algo —me dijo, y se encaminó ala