(Narra Dante Weiss) Al llegar a la cabaña el silencio entre ambos seguía sin interrumpirse, estaba tan distraído que no me di cuenta de lo que sucedía dentro. Annie abrió y entró primero, sostuvo la pesada puerta y me dejo pasar, pero en cuanto se dio la vuelta gritó mientras se tapaba los ojos. ― ¡Lo siento! ¡Lo siento! ― Y sin apartarse las manos de la cara subió las escaleras dando trompicones, en cuanto Annie despareció yo miré aquello que le hizo reaccionar así. Carter se estaba cubriendo a toda prisa con un cojín mientras buscaba su ropa. Yo habré puesto una expresión lobuna de total asombro. Bree estaba semi oculta tras el sillón y sonreía sin vergüenza. ― Ups. ― Dijo. ― No los escuché venir. Mi error. ― Levantó una manos en señal de disculpa, pero su sonrisa de diversión no le