Emma Miro ansiosa el reloj, no es normal que este desesperada por salir de aquí, y no es para menos, hoy tendré mi segunda cita con Matteo. -¡Emma! Despego la vista del reloj y miro perpleja a la profesora, sé que esta molesta, no es difícil saberlo. -¿Qué ocurre contigo? -Me distraje. -respondo. -Eso ya lo sé, quiero saber por qué. -Bueno ... estaba pensando. -¿Y eran pensamientos relacionados con el tema de hoy? Niego con la cabeza. -Pues entonces déjalos de lado, cuando salgas de mi clase puedes pensar libremente. La profesora sigue con su clase y trato de poner atención. -¿Ocurre algo Emma? -susurra Sandy. -No. -¿Aún sigues enojada por lo que paso? -No estuvo bien Sandy. -Superalo ya Emma, nada malo le sucedió a Leo. -Eso lo sé, y creo que tienes razón, debo superarlo