“POSITIVO”. Leo varias veces esa misma palabra, confirmando lo que sabía que saldría en los resultados. Suelto el aire que estaba conteniendo y no logro saber cómo me siento al respecto, pues son demasiadas cosas las que pasan por mi mente en estos momentos. «Seré madre», «Madre soltera», «Un bebé, producto del amor que tengo por Peter, aunque todo haya sido una mentira por su lado», «Él está esperando un hijo con Carla», «No se debe enterar», «¡¿Qué voy a hacer?!». Me empieza a doler la cabeza. «¿Qué le diré a mi mamá? ¿Cómo tomará las cosas?», «¿Estoy preparada para ser mamá?». Sacudo la cabeza y sigo caminando por el pasillo, para encontrarme con mis amigos, que esperan ansiosos en la sala de espera. —¿Y…? —pregunta Camila apenas llego a ellos. Le extiendo el resultado y ella frun