Como todos sospechábamos, se trataba de una misión. Sigo sin entender porqué hacemos misiones si ni siquiera sabemos pelear, nos tiran a los lobos a que nos defendamos como podamos. No les importa si morimos. Las musas susurran entre ellas como si no todas estuviesen de acuerdo en algo, se podía ver rostros de angustia en dos de ellas. ¿Qué pasa?. Mientras ellas seguían susurrándose, mi atención va hacia el hermoso jardín del Olimpo. Éste jardín es uno de los lugares más sagrados de todo el lugar, estaba cubierto de una infinidad de distintas clases de flores, en el horizonte habían enormes montañas que dan la impresión de un enorme valle, más el viento que siempre sopla de forma apacible, ocasionando que hayan continuamente pétalos de flores flotando. Es sin duda mi lugar favorito en to