— Necesitamos hacer esto. — Valeria le mostró una receta a Adrián. — Una red velvet es todo lo que uno necesita para mantener el buen ánimo. — Y, ¿cómo es que yo solo te necesito a ti? — Le coqueteó, Adrián. Valeria rio por las cosquillas que le siguieron a ese comentario. Se habían quedado todo el día en la habitación como se lo habían propuesto, pero ahora ambos querían tomar un poco de aire fresco, bueno, Valeria quería ir a la cocina y Adrián, quería ir dónde ella estuviera cosa que fuera de parecerle hostigador, le pareció muy tierno a Valeria. — ¿Sabes qué he estado pensando? — Era una pregunta sin respuesta. — Hoy estuviste todo el día aquí… — Él asintió. — Se me hace algo inquietante pensar que estoy retrasando tu trabajo. — Me estoy tomando la luna de miel.