Alessandra.
-Aquí esta la comida- me dice el hombre que supongo fue el mismo que me secuestro de camino al parqueadero
-Yo no tengo hambre- Respondo con firmeza mientras lo veo con atención e intento memorizar cada pequeño detalle a cerca del sujeto
-No te pregunte si tenias o no hambre, eso no es mi problema, ahí esta tu plato- Sentencia entretanto me mira de mala gana y se da la vuelta para marcharse
Yo me levanto tan rápido como me es posible, y antes de que el pueda cerrar la puerta, sostengo la manija con mucho cuidado, el parece no darse cuenta, y entonces cierra la puerta sin problema, o eso es lo que yo le hago creer, porque al tenerla sostenida, no se ha cerrado totalmente, he estado cavilando a cerca de la forma de escapar de aquí, y ahora que lo he conseguido no pienso de
