EMILIANO…
La observo dormir mientras a mi mente viene todo lo que paso hoy, todo fue irreal. Pero me siento tranquilo al saber que todo salió bien y que la tengo aquí conmigo.
Ella se mueve haciendo que la sabana que cubre su espectacular cuerpo caiga más abajo de su cintura dejando ver su vientre. Hay está creciendo mi hijo, pienso sintiendo mi cuerpo temblar de emoción, pero también de miedo al recordar las palabras de Melek.
- Te vez muy pensativo – dice sin abrir sus ojos.
- Vuelve a dormir, lo necesitas – respondo tratando de evadir el tema. No me siento preparado para hablar con ella.
Veo que abre los ojos y en su mirada hay dolor, pero sin más se pone de pie y camina hacia el cuarto de baño. Me siento en la cama re
