CAPÍTULO 3 FIESTAS Y ALCOHOL

1976 Words
Llego a mi casa después de estar toda la tarde con mi jefe, es muy inteligente, desde muy niño le han gustado los autos, ha ganado muchos premios internacionales de robótica automotriz, el solo ha logrado posicionar su empresa en los primeros lugares, pero también tiene muchos defectos, uno de ellos es que es un promiscuo sin sentimientos hacia las mujeres con las que se acuesta. No conozco a ninguna que haya pasado más de 2 veces con él, bueno a excepción de Ivana Mariscal, pero con ella también solo es sexo, el mismo lo ha dicho.  Su familia es de dinero, sus padres se la pasan viajando, es hijo único, siempre ha vivido solo, suele aislarse cuando trabaja, y en su corazón no entra nadie, más que sus amados autos. Ya es un poco tarde – dice mi nani y me saca de mis pensamientos Si, perdón se me pasó avisarte estuve trabajando – digo y ella me mira fijamente ¿Con tu jefe? – pregunta y asiento, a ella se le forma una enorme sonrisa Nani… - digo porque se lo que se imagina Está bien, está bien, buenas noches – dice y me da un beso Buenas noches nani – digo, ella sonríe pícaramente y se va a su cama, mi nani sueña si cree que algún día pasará algo entre en mi odioso jefe y yo. El día llega, me levanto y me pongo un vestido pegado al cuerpo color rosa pálido con pliegues en los hombros, mangas cortas, mis zapatillas color nude y mi bolsa del mismo tono, desayuno con mi nani y salgo de la casa, llego a la oficina, reviso mis pendientes, la agenda de Damián está llena, en este momento debe estar almorzando con el Sr. Garduño, ese negocio ya lo cerramos. La tarde llega y no he sabido nada de mi jefe, no ha venido a la oficina, como es viernes seguramente se fue de fiesta. El teléfono suena y contesto, es uno de los ingenieros que necesita por escrito la aprobación de mi odioso jefe, cuelgo y suspiro, donde se supone que lo voy a encontrar Marco su teléfono, pero no contesta, maldita, sea, imprimo los documentos y los acomodo, no me va a quedar de otra mas que buscar a mi odioso jefe por cielo mar y tierra hasta que me firme estos documentos. Vuelvo a marcar su número, pero sigue sin contestar, intento nuevamente y después de 5 tonos, escucho su voz Srta. Molina, ¿Qué hace aun en la oficina?, siempre trabajando – dice alegremente, se escucha mucho ruido de fondo y música, quien sabe en qué lugar de mala muerte está metido Damián, ¿dónde estás? – digo fuerte esperando me escuche Estoy en un lugar muy divertido – dice, ruedo los ojos, a veces es muy idiota Necesito me firmes algo, es muy importante – digo casi gritando porque el ruido de fondo me ensordece Tendrá que venir por mi Srta. Molina – dice y ruedo los ojos de nuevo, este hombre me va a sacar canas verdes Ok… mándame la dirección – digo y escucho más fuerte la música, veo el teléfono y la dirección,  oigo como todos gritan, es tan estresante, le cuelgo y salgo, busco un taxi y le doy indicaciones, 20 minutos después llegamos a una discoteca, desde afuera se oye la música fuerte, le pago al taxista y me bajo, camino hacia el lugar, afuera hay muchas personas en fila tratando de entrar, es obvio que es un lugar exclusivo, me acerco a uno de los guardias,  y hablo fuerte Necesito pasar, adentro está - digo, pero el hombre no me deja terminar No puede pasar – dice y se da la vuelta, maldita sea Disculpe - digo de nuevo y lo toco, él se gira y me mira sobre sus lentes negros Ya le dije que no puede pasar – dice de nuevo mientras todos los de afuera se amontonan, aplastándome Con cuidado, hey, con cuidado – amenazo, pero no me hacen caso, suspiro fuerte y me zafo de la multitud, llego de nuevo al hombre y me paro frente a el Voy a pasar quieras o no – digo con firmeza y el ríe con sarcasmo, suena mi teléfono y contesto sin quitarle la mirada al guarura Sta. Molina, ha tardado demasiado– dice mi odioso jefe con sarcasmo al otro lado de la línea Damián, estoy afuera pero no me dejan pasar – digo tratando de que me escuche, aunque lo dudo por a fuerte música Pásamelo – dice mi jefe, le doy el teléfono al guardia que me mira con altanería, lo toma y lo pone en su oído, un segundo después su aire de patán se desvanece Si señor, si disculpe señor, lo siento señor – repite el guardia, me da el teléfono y se quita los lentes negros Disculpe Srta., pase por favor – dice con gentileza, lo fulmino con la mirada y paso sin voltearlo a ver Entro al lugar, el ruido de la música está a desniveles muy altos, todos brincan y bailan dentro del oscuro lugar, algunas luces neón se esparcen por el sitio, camino entre las personas que bailan y beben, llego a la barra y una mujer bar tender me mira Creo que te equivocaste de oficina – dice con burla mirando mi vestido formal Estoy buscando a una persona, es un hombre alto, ojos azules cabellos castaños, viste de traje, elegante, tiene un lunar en el cuello– digo y ella sonríe ampliamente Quieres decir que buscas al monumento de Damián Fabre – dice mordiéndose los labios sensualmente, ruedo los ojos Claro, lo conoces, porque no me sorprende – digo para mí, pero ella me escucha Quien no va a conocer a ese hombre tan hermoso – dice sonriendo, si supiera que lo que tiene de hermoso lo tiene de estresante ¡Srta. Molina! – dice de pronto, me giro y lo miro, tiene alguna bebida cara en la mano, las luces del lugar hacen verlo espectacularmente sexy, me regaño mentalmente, lo que tiene de sexy lo tiene de odioso Srta. Molina que bueno verla por acá – dice con su rostro cerca de mí, sus ojos azules brillan intensamente, huele a cigarro y alcohol mezclado con su perfume ¿Qué quiere de tomar? – pregunta y niego, solo quiero que me firme los papeles e irme de aquí Nada, solo necesito tu firma – digo mientras la música suena a todo volumen Srta. Molina eso no es nada romántico – dice con burla y la mujer de la barra se ríe, la fulmino con la mirada y ella se aleja Por favor, tengo que enviar estos documentos para que no se atrase la producción, el ingeniero me llamó y me dijo que no los habías firmado – digo con tono seco, el se acerca mas a mi y toma de su trago Srta. Molina, siempre trabajando ¿qué hace para divertirse? – pregunta y ruedo los ojos Te dejo los documentos, los firmas y los mandas y si no lo haces y se atrasa la producción, quien va a perder millones de dólares no seré yo – digo y me adelanto, pero me toma la mano deteniéndome Está bien, está bien Srta. Molina, es muy enojona, a ver dígame donde firmo – dice y me suelto de su agarre, sonríe seximente, pero lo ignoro, tomo los documentos y le doy un lapicero, señalo las hojas que debe firmar y lo hace en la barra de la ruidosa discoteca Termina y me entrega los papeles, sonríe ampliamente y yo solo muevo la cabeza con enfado Ya firme, ya no se enoje Srta. Molina, mejor vamos a bailar – dice pero niego de inmediato mientras guardo los documentos No gracias, tengo cosas que hacer, con permiso – digo pero no me deja pasar Es usted una aguafiestas, ahora tendré que irme también – dice y lo miro mal Vamos – me toma la mano y me jala fuera del lugar, llama a su coche y lo traen, me hace señas para que me suba, lo hago de mala gana y después lo hace el, maneja mientras voy en silencio, este hombre me estresa, mando los documentos desde mi celular para no mirarlo manejar Estuvo muy divertida la fiesta, te la perdiste – dice mi jefe, lo miro con enfado y él lo nota Siempre me miras así – dice tratando de sonar enojado pero la sonrisa burlona en su rostro no lo deja Porque siempre haces cosas así – digo enojada, este reporte se lo deje desde la semana pasada y no lo había firmado, espero que no se retrase la producción, a veces parece que no le importa nada más que las mujeres, el alcohol y sus amados autos. Srta. Molina no te enojes, estaba aburrido, fue una semana de demasiadas juntas y lo sabes– dice, no digo nada, mi celular suena, miro la pantalla el nombre de nani ¿Quién es? – pregunta tratando de ver mi teléfono y lo callo No hagas ruido – digo y contesto el teléfono Hija ¿vas a llegar tarde hoy? – pregunta mi nani mientras hago malabares para que mi odioso jefe se calle Si, si un poco, pero no te preocupes, estoy bien, estoy trabajando – digo, mi jefe me mira y sonríe Srta. Molina – dice susurrando, lo miro y pongo mi dedo en mis labios en señal de que se calle Está bien hija, por favor ten cuidado, no salgas muy tarde de tu trabajo – dice mi nani por el teléfono No lo había notado, tiene unos ojos muy bonitos Srta. Molina – dice mi jefe y hace que me descontrole, lo miro, sus ojos azules como el cielo me miran también, baja su mirada a mis labios, no sé porque mi corazón empieza a latir más fuerte y mi estomago se hace nudo, esto no puede pasar, seguramente está borracho, me repito en mi mente, tratando de controlar el pulso de mi corazón Hija – dice mi nani y me saca de su hechizante mirada, soy tan tonta, tonta Si, si no llegaré tarde, descansa, llego en un rato – digo y cuelgo, me giro para mirarlo y el sigue manejando con una sonrisa torcida, suspiro fuerte, debo de dejar de ponerme en estas situaciones, yo no puedo sentir nada por él, el jamás sentirá nada por mí, además solo se está burlando de mi Estaciona el coche en la entrada de mi edificio, miro sus ojos azules, y su sonrisa torcida, siempre es tan jovial y divertido, como si nada le importará, tal vez es cierto, es millonario no creo que le importe mucho lo que pasa su alrededor, por algo es mi jefe millonario  Gracias por ir por mi Srta. Molina – dice con su rasposa mirándome intensamente De nada – contesto secamente y trato de bajarme, pero me detiene, me giro de nuevo y me encuentro con sus ojos azules clavados en mi Gracias – dice de nuevo y arrugo el ceño sin entender ¿Por qué? – pregunto sin entender, mientas me pierdo en el resplandecer de sus bellos ojos Por estar… siempre junto a mi – dice y me sonríe tiernamente, siento como mi corazón late con fuerza, espero no note como me ha desencajado, trato de reponerme, pero no sé si estoy disimulando Por nada, Damián… por nada – contesto y él sonríe ampliamente, me bajo de su lujoso auto y me despido con la mano, el arranca el motor y se aleja de mí, no puedo pensar en nada más que en eso, porque entre él y yo nunca en este planeta pasaría algo más, yo no podría ser su amante, el siempre será mi odioso y sexy jefe.    
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