Salimos del hotel tomados de la mano viendo que está anocheciendo, veo que un auto espera por nosotros durante el camino hablamos de la ciudad que es aún más hermosa cuando los últimos rayos de sol se reflejan sobre esta. Un rato después llegamos a aun lugar a las afueras de la ciudad. Al bajar del auto caminamos unos minutos hasta que llegamos a un lugar donde hay una carpa decorada con lucecitas frente a esta hay una fogata. - Que hermoso – digo caminando hasta la carpa fascinada por el lugar. - Solo para nosotros – dice Tristan abrazándome por la cintura entrando a la carpa donde hay un colchón y cojines. Dejamos todo antes de irnos a sentar frente a fogata cubriéndonos con una manta poniendo mi cabeza sobre su hombro. - Acepto – digo sintiéndolo tensarse, levanto la cabeza observánd