El incesante ruido que emitía su teléfono por una llamada telefónica la despertó, se había quedado dormida a media tarde después de dejarle una prueba de embarazo casera a Camila.
No había logrado dormir la noche anterior, tenía tantos sentimientos encima, dolor, alegría, incertidumbre, satisfacción, era extraño como la muerte de una persona podía causar tantas cosas en su corazón, no lo conocía, sería la primera vez que lo vería y también sería la última vez, eso fue lo que no la había dejado pegar un solo ojo, la idea de verlo y poder cumplir la promesa que había hecho en la tumba de su fallecido esposo, finalmente podría vengarse de Juliano Salazar
Al mirar la pantalla de su teléfono descubrió que la llamada había sido de Julián y desgraciadamente no había conseguido contestar, pero h
